Normalmente se habla de "el cerebro humano" como si todos los cerebros individuales fueran iguales. Sin embargo, esto no es así puesto que existe variabilidad individual en nuestro sistema nervioso que va desde características como pueden ser la disposición de surcos individuales y de los lóbulos que delimitan, la superficie y el volumen de estructuras como la corteza cerebral y los fascículos que conectan distintas regiones cerebrales entre sí.
Esta variabilidad se ha asociado con aspectos de la conducta humana como respuestas motoras, percepción visual o inteligencia así como en conductas psicopatológicas como es la psicopatía.
Las diferencias morfológicas y funcionales entre distintos cerebros surgen de la interacción entre información genética e información ambiental durante el desarrollo individual.
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